sábado, 13 de marzo de 2010

El Problema de los Clásicos o Demagogia Musical.

Queridos míos.

A tenor de los recientes acontecimientos que han sacudido este espacio de la blogosfera, me veo obligado a hacer una declaración de intenciones: recurrir a los clásicos en un desafío es fácil y, hasta cierto punto, zafio. Es, haciendo una extrapolación al tema de la política, un claro ejemplo de demagogia musical.

Me explico. Se habla de demagogia cuando un político apela a verdades universales imposibles de rebatir. Es decir, cuando un político dice que si sale elegido defenderá la democracia, está siendo demagógico, ya que desde el mismo momento que acepta participar en el juego electoral se da por sentado que acepta y defiende la democracia.

Este caso, por tanto, es lo mismo. Es muy fácil proclamar desde un púlpito la validez atemporal de los clásicos y, lo que es peor, juzgar otras propuestas a tenor de aquellos. Y es demagógico porque, ¿cómo se rebate un Have a Drink On Me? ¿Qué se utiliza para contrarrestar un Back in Black o, dejando de lado a los australianos, un Rebellion In Dreamland? ¿Hay acaso alguna canción que las iguale o incluso las supere? No. Son como armas de destrucción masiva que arrasan con todo lo que tocan. Por tanto, declaro mi parecer: usarlas en un desafío musical como los High Fidelity es un claro ejemplo de Demagogia Musical.

Respetaré el anterior post de NvN porque no era un High Fidelity y por qué siempre viene bien escuchar esos dos temazos. Pero repito: qué fácil es esconderse detrás de tamañas creaciones, a salvo de las críticas, mientras los demás arriesgamos y nos exponemos a los comentarios maledicentes y retorcidos.

Yo, hijos míos, arriesgo. Arriesgo y acepto las consecuencias. Seguid establecidos en vuestra monotonía, estancados en un rincón de tiempo y espacio a salvo de cualquier contratiempo. Tarde o temprano deberéis salir de vuestro onanismo musical y enfrentar las verdades del mundo.

He dicho.

Y ahora os dejo con una de mis apuestas alejadas de los clásicos. Sí, a mi me gusta esto:




Adelante, criticadme.

3 comentarios:

NvN dijo...

No os la vais a creer, pero estaba escuchando a los murcianos (Maxi ha vuelto…) cuando de repente me encuentro con el último post de T-(Molas Mazo)-Rock, lo que hay que ver, jajaja !!!

Pero vayamos al grano:

En primer lugar dejar claro que admiro a TRock por su dedicación y perseverancia en la búsqueda de nuevos y refrescantes valores que representen de forma digna los ideales que dieron origen a este muestro Blog, pero también he de decir que todos nosotros nos hallamos en esa circunstancia, en mayor o menor medida (que me lo digan a mí la primera vez que escuché In Flames…o a Rocksugar, por poner un ejemplo más reciente).

Por otro lado, he de añadir que “Los Clásicos” constituyen la fuente de donde mana toda mi base musical, nunca lo he disimulado y así lo he intentado transmitir siempre. ¿Qué es fácil recurrir a ellos? Creo que al contrario, no es nada fácil este papel si tenemos en cuenta que hablamos de ellos en el 90% de nuestras conversaciones…y si no llegamos al hastío por algo será…o no??

Añadir que para mí la demagogia no es en absoluto intentar rebatir ninguna propuesta musical interesante e innovadora (aunque haya pocas) recurriendo a los citados clásicos. La demagogia no es, aplicando el símil democrático utilizado por TRock, apelar a las Verdades Universales para un fin, pues universales son, y como tales están fuera de toda valoración o tendencia política (eso lo ve todo el que tenga dos dedos de frente, o cuernos…). La demagogia es utilizar siempre lo “políticamente correcto” bajo una hiriente bandera partidista para intentar llegar a ellas. A la hora de la verdad (que en política no existe, no lo olvidemos) se nos da un ardite “lo correcto” , porque lo que es para unos no lo es para otros y viceversa, simplemente. Nos aferramos a nuestros valores reales, propios, sin temer las consecuencias negativas que ello pueda tener. Pues así hemos sido concebidos los Hijos del Trueno!!!

Por último, TRock sabe mejor que nadie que puedo citar mil y una propuestas musicales “alejadas de los clásicos”, pero es que tratándose de un Alta Fidelidad, centrado en “La Resacca”, en la juerga de la noche anterior… la ocasión no merece menos que celebrarlo a lo grande, ni mejor ni peor, sólo a Lo Grande. Prefiero el martilleo incesante de la batería de Phil Rudd que descender a un estado catatónico irreversible… Los clásicos siempre han estado presentes en mis mejores y peores momentos, de ahí que los cite y siga citando en los Alta Fidelidad, “post clásicos” donde los haya.

Esa es mi opinión. Menudo Tocho…¿me estaré pareciendo a alguien? Jajaja !!!

He dicho.

TRock dijo...

jajajajaja, menudo tochazo. No hacía falta, coño. Si nos entendemos ya. Lo de la demagogia era para darte el coñazo, que eres un guay. Evidentemente tu High Fidelity ha reventado al mío. Pero no te lo iba a poner fácil y reconocerlo...

NvN dijo...

jajaja hay q joderse

es q estoy fasi hoy jajaja